Paolo Menghini, padre de Lucas Menghini Rey, víctima de la tragedia de Once, habló con Radionauta sobre las relaciones entre el grupo Cirigliano y el Gobierno Nacional.
Por medio de un comunicado, los familiares y víctimas salieron a repudiar un nuevo negociado para el equipamiento del Centro Cultural Néstor Kirchner, con los empresarios que se encuentran procesados. En este sentido, según remarcó el entrevistado, la preocupación pasa porque los lazos entre el poder económico que gestó la tragedia y el poder político se encuentran hoy intactos: “Acá no hay una cuestión de legalidad, porque seguramente el tema de licitación tenga las reglas que debe tener cualquier cuestión de compra de equipamientos en cuanto a licitaciones y demás. Acá estamos hablando de cómo el poder político y el poder económico que gestó la tragedia siguen de la mano”.
La empresa heredada por los hermanos Cirigliano, consiste en un holding que fueron armando con los años, a la vez que se encargaron de armar uniones y acuerdos con el gobierno. Corporate Corp. es parte de estas empresas.
Su procesamiento dentro de la tragedia tiene que ver con la malversación de cerca de 2800 millones de pesos en subsidios, girados desde el Estado Nacional y nunca puestos en revisión, caso que ya está siendo ventilado en un proceso judicial. “Ha empezado la etapa que busca desentrañar toda la maraña económica y como ellos armaron el entramado que les permitió licuar esa plata del estado en su propio beneficio”.
Finalmente, Menghini habló sobre el juicio de la tragedia que se está llevando adelante: “Nosotros estamos muy contentos de cómo se va desarrollando el juicio, tenemos la convicción absoluta de que todos los días se va demostrando de manera más cabal la responsabilidad de los funcionarios Jaime, Schiavi, Sicaro y Ochoa Romero y de los empresarios Cirigliano y sus gerentes”.
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