En la columna ambiental de Tinta Verde, en Malos Perdedores, Daiana Melòn se refiriò a la geoingenierìa climàtica: una nueva apuesta de los sectores dominantes por resolver los mismos problemas que engendrò el modelo capitalista de desarrollo.
La geoingeniería o ingeniería climática está vinculada a las técnicas centradas en la intervención en gran escala en océanos, suelos y atmósfera terrestre con el objetivo de reducir las consecuencias del cambio climático sin cuestionar las causas que lo generan. Si bien no se ha comprobado su eficiencia, los grandes contaminadores del planeta, aquellos que más liberan dióxido de carbono y generan gases de efecto invernadero, están invirtiendo en esta área. Se trata de un nuevo parcha del capitalismo más concentrado frente a una crisis climática y ambiental innegable.