Un equipo interdisciplinario de la Facultad de Odontología de la UNLP comenzó a aplicar una terapia con derivados de cannabis en pacientes con patologías neurológicas. En la “Primera Maraña” hablamos con Virginia Lazo, coordinadora del equipo que lleva adelante esta terapéutica
La Facultad de Odontología de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) comenzó a utilizar una terapia con derivados de las plantas de cannabis para la atención odontológica de pacientes con patologías neurológicas complejas como encefalopatías, trastornos de espectro autista y retraso madurativo. Se trata de pacientes en los que era necesario aplicar anestesia general en quirófano al momento de someterlo a una práctica.
En relación a ello, en la ”Primera Maraña” dialogamos con Virginia Lazo, coordinadora del equipo interdisciplinario encargado de llevar adelante el tratamiento, quien dio detalles de cómo desarrolló el proceso y de los beneficios que implica aplicar este tipo de terapéutica.
“Nosotras fuimos notando en todo este tiempo que los pacientes venían con una gran polifarmacia encima, con toma de muchos medicamentos, con los efectos secundarios de todas estas medicaciones. Entonces, entendiendo que muchos de estos pacientes eran sometidos a un quirófano para recibir anestesia general, porque a algunos era imposible atenderlo en el sillón, por movimiento involuntarios y otros signos, entendiendo que hoy tenemos una ley de cannabis medicinal, entendiendo que podemos atender pacientes tanto los médicos como los odontólogos, podemos prescribir cannabis medicinal, entendiendo que estamos en una institución pública y de atención gratuita a la comunidad, y entendiendo todas las propiedades que tiene el cannabis como neuromodulador, neuroprotector, inmunomodulador, antiinflamatorio, regulador del sueño, ansiolítico y con todas las pruebas que ya hay dijimos ‘cómo no lo vamos poner en práctica’”, explicó Lazo en el inicio de la charla.
“Con un grupo de compañeros nos empezamos a formar, pero nos faltaba una parte importante que es la práctica clínica. Para ponerlo en funcionamiento nos pusimos en contacto con la odontóloga Mariana Ríos, que hoy en día está trabajando con nosotras, y nos vinculamos con una asociación civil, que se llama ‘Todos unidos cultivando en familia’, que nos dona la materia prima y así hacemos nuestros propios preparados. La verdad es que estamos haciendo un trabajo muy hermoso con un grupo totalmente interdisciplinario. Arrancamos con 24 pacientes el año pasado y hoy ya tenemos casi 60”, relató con orgullo la investigadora, en el aire del programa coproducido por Pulso Noticias y Radionauta.
“Mariana Ríos fundó esa asociación civil, entonces esa lucha ya la hizo desde el otro lado, como mamá. Necesitaba esta medicina para su hijo, empezó en la clandestinidad, como empezó la mayoría, y después empezó la regulación de la ley, que al principio fue para quienes padecían epilepsia refractaria hasta que en el 2020 se amplió para todo tipo de patologías, por eso los odontólogos entramos en esa proyección”, explicó.
En ese sentido resaltó que “es muy importante la vinculación con organizaciones sociales para trabajar en conjunto y cumplir los objetivos planteados”, y afirmó: “estamos recuperando saberes, no estamos haciendo nada innovador, hablamos de esto, de recuperar saberes perdidos a causa del prohibicionismo”.
El equipo del centro de Alta Complejidad de la Facultad de Odontología, que coordina Virginia Lazo,comenzó a aplicar cannabis en pacientes que padecen Encefalopatía Crónica No Evolutiva (ECNE), Trastornos de Espectros Autistas (TEA) o retraso madurativo y también en pacientes con cáncer bucal, además de otros tipos de trastornos. Esta perspectiva se da en el marco regulatorio de la Ley Nacional 27.350, de investigación médica y científica del uso medicinal de la planta de cannabis y sus derivados.
Lazo señaló que esta terapéutica coloca a los profesionales en otro lugar, entendiendo que en este proceso la obligación tiene que ver con acompañar a los pacientes y sus familias. En relación a ello indicó que existe lo que se denomina “síndrome del cuidador” explicando que “es cuando la mamá, el papá, el hermano o un tío que cuida a esta persona con esta problemática, también está dentro de esa problemática y padece de muchos dolores, padece de insomnio, padece de un montón de situaciones, en donde también lo incluimos en la terapéutica, porque al ser una terapéutica totalmente distinta al resto la podemos practicar en familia. Entonces ahí se va generando un vínculo distinto y un alivio tremendo”.
También se refirió a la aplicación del cannabis medicinal para el tratamiento del bruxismo, una afección que padece buena parte de la sociedad: “La verdad es que está funcionando muy bien, para el bruxismo no había algo específico, es un trastorno multifactorial, y con el cannabis nos damos cuenta que vamos llenando todos esos espacios vacíos ya que el cannabis no va a actuar solamente en el desgaste dentario que provoca el bruxismo sino que va a ir a todos los lugares por la distribución de receptores que tenemos a lo largo de nuestro organismo, ya que nosotros en nuestro sistema generamos nuestro propio cannabis también”, detalló.
“Usamos todas las vías de administración: la vía sublingual, la vía digestiva mediante infusiones, la vía vaporizadas, en pasta dental, porque además tiene grandes propiedades antimicrobianas, desinflama mucho las encías cuando tenemos gingivitis”, describió Lazo.
A partir de esta experiencia, la Facultad creó la comisión de Cannabis con carácter interdisciplinario, multidisciplinario y transdisciplinario, constituida por personas dedicadas a diferentes actividades relacionadas al cannabis (odontólogos, médicos, cultivadores, abogados, trabajadores sociales) teniendo como finalidad tratar temáticas inherentes a la Terapéutica Cannábica, la realización de Proyectos de Investigación y la intervención en Proyectos de Extensión.
Sobre ello, la especialista manifestó que “estamos dictando un posgrado a nivel nacional en la Facultad para otros y otras odontólogos y odontólogas, o médicos y médicas que quieran sumarse a esto. En este momento estamos transcurriendo la segunda mitad del posgrado y el año que viene se va a dictar de nuevo”.
“La realidad es que cualquier persona o cualquier institución que se quiera poner en contacto con nosotras para replicar este modelo, acá estamos a disposición de la comunidad”, concluyó.